La inflación sin control, los aumentos de precios en los alimentos, los tarifazos en el transporte y los servicios son el caldo de cultivo del descontento popular frente a un gobierno que se presentó prometiendo asado y que hoy cumple el plan de ajuste del FMI que trajo Macri.
Para dar cuenta de este plan antiobrero del gobierno y el FMI, el ministro Sergio Massa propone “anclar la inflación” colocando un techo del 60% (en dos tramos) a las paritarias del periodo 22-23, lo que fue saludado inmediatamente por la UIA. Mientras plantea ajustar salarios, premia a los sectores capitalistas del campo con rebajas impositivas, líneas de crédito y subsidios millonarios.
En este contexto el SAT se encuentra llevando a cabo un plan de lucha que empezó en enero con paros de 2 hs por turno en los lugares de trabajo con alto acatamiento. Campañas en redes, caravanas a las puertas de los principales canales de tv, incluyendo una a las puertas de Paramount Telefe que tuvo gran repercusión durante la transmisión del Gran Hermano que fue interrumpida por cánticos, gritos y piquetes.
El leiv motiv es “salarios por arriba de la inflación”, aplicando acuerdos (por ahora) trimestrales que ya sumó un 18% más suma fija de $25mil de octubre a diciembre del 22. Para el periodo enero 23 - Marzo 23 se reclama un aumento del 24% más la compensación del artículo 215 por el cual el gremio absorbe las primeras cuotas de aumento a los laburantes. Este último pedido es producto del descontento que produce dicho artículo y que fue expresado en las asambleas.
Las patronales vienen teniendo una posición intransigente ofreciendo aumentos escalonados que no llegan ni por asomo a la inflación proyectada, que se estima que de acá a junio superará el 60%.
Frente al fracaso de las mesas de negociación, el Ministerio de Trabajo en su momento acercó una propuesta conciliadora que el gremio tomó positivamente. Las cámaras empresarias lejos de llegar a un entendimiento, lograron la intervención del Ministerio de Economía para que el Ministerio de Trabajo retire su propuesta y dicte la conciliación obligatoria. Es decir, las paritarias son intervenidas por el mismísimo Sergio Massa a gusto y piacere de las patronales.
Este accionar puso en conflicto al gremio con parte del gobierno ya que de ninguna manera se esperaban semejante desplante por parte de sus socios políticos.
Mientras tanto, el acatamiento a la conciliación obligatoria reduce al plan de lucha del SAT a una acción propia del aparato, donde la base trabajadora está impedida de participar activamente ya que las resoluciones se toman en los plenarios de delegados y no en las asambleas.
Desde la naranja de tv planteamos que para ganar esta pulseada debemos impulsar que ninguna paritaria se discuta ni se firme sin mandato de las bases.
El carácter trimestral de estas negociaciones conducen al desgaste de la lucha y sobre todo habilita a la postergación permanente del urgente aumento ante la devaluación sistemática del salario. Por eso entendemos que hay que exigir cláusulas de actualización automática y aumentos que cubran la canasta familiar para todas las categorías.
Sostenemos la importancia de la participación activa de los trabajadores audiovisuales de streaming que hoy día son la fuerza de trabajo tercerizada y de contratos precarios de eventualidad de las grandes cadenas internacionales y que aún no cuentan con un convenio acorde a sus tareas, ni acceso a la sindicalización y tampoco a la obra social de tv.
La importancia de abolir todo impuesto al salario tiene que ser bandera de nuestro gremio ya que muchos trabajadores cuentan con dos trabajos para llegar a fin de mes siendo víctimas de este saqueo.
Llamamos al paro y a movilizarnos este miércoles para demostrar en las calles la fuerza de lxs trabajadorxs de la televisión.
Lxs trabajadorxs de TV no solo le tenemos que ganar a la inflación, si no al ajuste en regla que aplica el FMI al conjunto de la clase trabajadora.
Gabriela Pachi - Naranja de TV
No hay comentarios:
Publicar un comentario